- Vigile el nivel de glucosa en sangre, procure que sea el mejor posible. Buena dieta y ejercicio.
- Inspeccione todo los días sus pies. Si tienes algún problema de visión solicite ayuda de un familiar, busque si existen heridas, rozaduras, ampoyas etc.
- Lave diariamente los pies durante 10 minutos aproximadamente en agua tibia y con jabón neutro. Séquese bien los pies, especial atención entre los dedos.
- No utilice agentes irritantes como los callicidas, pueden causarles daños irreparables.
- Evite que los pies estén ni muy secos ni muy macerados, utilice crema hidratante si es necesario.
- Corte las uñas de forma rectas, si las uñas presentan algunas dificultad recurra al podólogo para su corte.
- Utilice calor natural para proteger sus pies, no se aproxime mucho a las fuentes de calor como estufas, braseros….
- El calzado debe ser cómodo. Utilizar de manera progresiva el calzado nuevo, los calcetines tienen que ser de material noble (algodón, lana..) y que no oprima.
- No camine descalzo, eleva todos los días unos 15 minutos las piernas.
- Consulte a su podólogo regularmente, si aprecia cualquier lesión acuda lo más rápido posible.